La luz natural es uno de los elementos más importantes en cualquier hogar. Es capaz de aportar mucha vida a un espacio y es un elemento perfecto para crear un ambiente agradable y acogedor. Además de ser estéticamente agradable, la luz natural también puede aportarnos mayor bienestar personal.
Dada su importancia en un hogar queremos comentar varios detalles para aprovechar al máximo la luz natural. Como hemos mencionado sus beneficios mejoran tanto la imagen como el ambiente de nuestras habitaciones. Tener luminosidad natural en casa es perfecto tanto para zonas como el salón o los dormitorios.
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Luz Natural con Ventanas y espejos
Una de las maneras más sencillas de maximizar la luz natural en nuestro hogar es aprovechar al máximo las ventanas. Por ejemplo, disponer de ventanas a ambos lados de la habitación nos garantizará que la luz natural se distribuya de manera uniforme por todo el espacio. Además, las ventanas más grandes pueden proporcionar más luz. Siempre que sea posible se debe valorar optar por ellas.
También podemos potenciar la luminosidad usando espejos, ya que son una excelente opción para reflejar la luz natural. Para aprovecharlos al máximo lo ideal es ponerlos frente a las ventanas. De este modo conseguiremos reflejar la luz en diferentes direcciones y aprovecharla al mucho más.
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Luz Natual en Colores y textiles
Los colores escogidos para pintar nuestras habitaciones son clave para potenciar la luz natural. En este sentido los claros son los indicados para reflejar la luz natural y hacer que una habitación se sienta más brillante y acogedora. Por ejemplo, tonos neutros como el blanco, el beige o los grises suaves son ideales.
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En buena medida dependerá de nuestro estilo decorativo, aunque estos colores encajan muy en muchos interiorismos. A partir de aquí el mobiliario también puede contribuir a generar un ambiente luminoso y acogedor. Para tonos neutros como los que hemos mencionado los acabados en madera son los grandes aliados.
Al igual que los colores claros, las telas claras también pueden contribuir a reflejar la luz natural y hacer que una habitación parezca más luminosa. Para ello nada mejor que escoger telas ligeras para elementos como las cortinas, la ropa de cama o la tapicería del sofá o los sillones.
Siguiendo con los textiles, para potenciar la luz natural debemos usar cortinas finas y translúcidas. En este sentido nos enfocamos a zonas como la sala de estar, destinada a la socialización. Para espacios más íntimos como los dormitorios podemos optar por una tela algo más opaca.
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La luz natural aporta mucha vitalidad y realmente consigue hacer que un hogar tenga un ambiente más brillante, acogedor y vital. Usando estos consejos podrás aprovechar al máximo la luz natural de tu hogar y crear un ambiente estéticamente agradable y muy acogedor para toda la familia.
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