Hoy visitamos una vivienda situada en un caserón italiano del siglo XIX. Han hecho una reforma preciosa y muy vistosa por los suelos utilizados; se trata de varios diseños hechos con baldosa hidráulica.
Esta baldosa es peculiar, porque no está hecha de barro ni cocida, sino está hecha de cemento prensado con una prensa hidráulica y decorado con moldes de colores y formas.
El cemento se deja secar, junto con los pigmentos. Se coloca sobre una cama de arena y la superficie es porosa, por lo que hay que dar un tratamiento a la superficie de baldosa hidráulica tras su colocación en espacios húmedos. El resultado es precioso y muy acogedor.
En este caso también resalta la utilización en toda la vivienda del rodapie y los dinteles remarcados en negro en las puertas interiores. El mobiliario es escaso y sencillo, para dar todo el protagonismo al suelo.
Visto en Dezeen.