Y no gastarte una millonada para hacerlo
Al igual que cuando te mudas o renuevas tu decoración, adaptar tu casa al cambio de estación se reduce a acondicionarla para nuevas circunstancias.
Seguramente estarás al tanto de lo básico para renovar tu decoración cada estación, tipo: nuevos textiles en cojines y cortinas, poner o quitar alfombras, sacar o guardar mantas de apoyo. Pero lo que vamos a ver es cómo adecuar tu vivienda a un cambio de circunstancia, bien sea del verano al otoño o de una situación familiar a otra.
Lo principal es saber qué necesitas exactamente, por qué es necesario realizar el cambio. Si es solo cuestión estética o si, además, implica un cambio en tu manera de vivir tu hogar. Porque eso determinará hasta qué punto se debe trabajar el cambio.
UNA MEJORA ESTÉTICA
Se trata de dar un aire nuevo a tu decoración, actualizarla, ponerla al día. Para eso puedes tener en cuenta las tendencias del momento o las ideas que vengas guardando desde hace tiempo.
Forma y uso se mantienen si el espacio funciona. Por lo que el cambio se reduce a los detalles: cambio de color en mobiliario o paredes, nuevos marcos o fotografías, textiles en tendencia que aporten calidez o contraste. También puedes decantarte por lámparas nuevas o un cambio en la distribución.
UNA MEJORA FUNCIONAL
En este caso, el cambio no solo es de estilo sino que implica acciones más grandes. Un nuevo miembro en la familia o una nueva función para un espacio de la casa, por ejemplo.
Lo más económico en estos casos es utilizar los elementos que ya tienes: convertir una cama que ya no se usa en un sillón añadiéndole cojines; utilizar una silla como mesa de noche para un cuarto de invitados improvisado, pintar la mesa de estudio para la transición de adolescente a estudiante universitario.
Analiza bien las posibilidades que te ofrece lo que ya tienes antes de lanzarte a cambiarlo todo.
A TENER EN CUENTA EN AMBOS CASOS
- Los colores no interfieran en la nueva actividad o uso. Por ejemplo, un baño pintado en rojo intenso puede resultar nada relajante si tu intención es recargar pilas con un buen baño al final del día.
- Los materiales sean siempre cómodos al tacto y a la vista: las alfombras de rafia son estéticamente bonitas pero no es agradable pisarlas descalzo, por lo tanto no es una buena idea ponerlas a los lados de la cama.
- La nueva distribución debe favorecer la circulación y apertura de mobiliario: ten en cuenta que los cambios son para mejorar el espacio. Por muy bonito que pueda quedar todo, si luego no es cómodo, acabarás queriendo cambiarlo de nuevo más pronto que tarde.
¿Estás planificando algún cambio en tu decoración?
Fuentes por orden: Homeplish · A Beautiful Mess · The Shingled House
2 pensamientos en “Cómo adaptar la casa al cambio de estación”
Un artículo fabuloso Nazaret.
¡El antes y después de la cocina es espectacular!.
Besos
Mil gracias Isabel. Sí, la verdad es que el trabajo de las chicas es muy bueno. Besos.