Ya estamos en verano y no hay nada mejor que pensar en desconectar. Vacaciones, viajes, o porque no vivir en una preciosa casa con unas buenas vistas, para disfrutar de la terraza y un delicioso aperitivo al aire libre…
Por eso, la casa que hoy os comparto, ubicada en la preciosa zona de Girona, puede ser ideal para todo ésto.
Esta casa de dos plantas con vistas al mar se encuentra en una parcela en pendiente, a la que se accede por una pasarela a la planta superior, destinada a uso privado.
La planta baja se muestra completamente abierta al mar en la esquina, disfrutando de una terraza con piscina y chill-out. La comunicación vertical se encuentra en el área central de la casa, a través de una escalera expresiva.
Externamente, la casa está pintada en color chocolate, favoreciendo su camuflaje en el paisaje circundante de pinos y rocas. La materialidad de la barandilla del balcón, muy a cielo abierto, favorece a la gran estrella de esta casa, que es el Mar Mediterráneo, la razón por la que se ha construido.
¿Que os parece? Yo estaría encantada de pasar más que un veranito en una casa como ésta ¿Y vosotros?
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La obra pertenece a Pepe Gascón Arquitectura y la fotografía de José Hevia