Transformación de un cobertizo en un refugio creativo
Para mi, el interiorismo no es sólo una ocupación, es también una pasión… Me encanta coger un espacio para transformarlo y adaptarlo a los gustos y necesidades de un cliente. Pero si realmente hay algo con lo que disfruto de verdad es con la rehabilitación de una vivienda. Coger lo que a muchos les parecería una ruina sin posibilidades y convertirlo en algo especial, ES COMO BESAR AL SAPO PARA CONVERTIRLO EN PRÍNCIPE.
Hoy os traigo una de esas transformaciones espectaculares, un cobertizo en el jardín trasero de una casa que se ha transformado en un acogedor refugio para trabajar.
Un rincón de inspiración escandinava, relajante e inspirador para su propietaria. La estilista y fotógrafa Paige Morse necesitaba un espacio independiente a la casa familiar para poder abstraerse en su trabajo. El estilo nórdico en interiorismo es ideal para este tipo de proyectos, luminoso y con pocas distracciones pero a su vez acogedor y cálido.