Hoy os presento una vivienda que está situada en Los Hamptons. Se trata de una segunda vivienda que pertenece a la decoradora Iris Dankner.
Los requisitos: que sirviera para recibir invitados, relajarse y disfrutar.
Lo que me gustó: que en las habitaciones personales de las hijas se permitiera salir del estilo general de la vivienda. La inspiración, ya verán, la encuentran en otros países.
El estilo que la define tiene mucho que ver con lo que uno se imagina para una vivienda de esa zona: amplia, luminosa, con muchos ventanales, el uso (y abuso) del color blanco en paredes y carpintería interior, y la madera oscura para el suelo.
Lo que la diferencia de lo que solemos ver: que no hay color turquesa, ni azules, ni coral… Y tiene poco de los toques playeros, marineros, o náuticos a los que estamos acostumbrados. En su lugar, se respira un aire menos informal, y mucho más clásico.