En ciertas especies de la naturaleza, el color rojo es usado como advertencia para avisar a los depredadores de su toxicidad y/o mal sabor. Y algunos estudios científicos demuestran que en los humanos, la visión del color rojo provoca que nuestros músculos reaccionen más rápido y con más fuerza.
El rojo aumenta nuestra reacción física porque lo percibimos como una señal de peligro.
Así, no es de extrañar, que el rojo simbolice el poder, y que se asocie con la vitalidad, la iniciativa y la ambición, el coraje y una actitud optimista ante la vida.
Vamos a daros las claves para que vuestro hardín o terraza sea más alegre, atrevido y original, y como no, de diseño, basándonos en el cromatismo del rojo.
Empezando por las paredes en un patio o terraza. Combinar los colores de una o más paredes o los límites de tu espacio exterior con un color potente como el rojo produce efectos muy sorprendentes.
Estos toques de color pueden venir reforzados por el uso de accesorios como las macetas, jardineras, jarrones del mismo color o con estampados.
Otros elementos del mobiliario, o el propio mobiliario, hábilmente combinados con los tonos de la vegetación y del pavimento logran crear atmósferas muy interesantes, y reforzadas por la noche con una adecuada iluminación indirecta generan el perfecto ambiente exótico y elegante.
Aunque también los hay, poner un pavimento rojo chillón, puede resultar un tanto estridente. Ahora bien, en algunos rincones o en los límites, a modo de mulch sobre la tierra, podemos poner gravilla sintética pintada, plástico reciclado e incluso vidrio esmerilado de color rojo creando efectos muy divertidos.
Si no queremos ser tan atrevidos, e ir a lo seguro, no nos fallará el poner ese toque de color en la gama decorativa de los textiles: cojines, mantas, cortinas, velas o toldos.
Y casi lo más importante, no vamos a olvidar aquello que de forma natural da la coloración y la textura al jardín: la vegetación. Flores, arbustos de hoja rojiza o árboles de hoja caduca nos pueden ayudar a dar esa nota de color a nuestro jardín.
Árboles de hoja rojiza en otoño, de gran porte como los arces y algunos robles, o otros más adecuados a jardines pequeños como la grevíllea, el liquidambar o el ciruelo rojo.
Arbustos adecuados también para terrazas como los cotoneaster y las piracantas de fruto rojo, o de floración roja como algunas camelias, rododendros, azaleas, callistemon, fucsias, hebes, y como no la reina del jardín, las rosas.
Trepadoras para los límites de nuestro jardín o para realzar la pérgola, podemos implantar variedades rojas de buganvillas, madreselvas o loniceras, y también con hojas de coloración roja en otoño como la viña virgen.
Y por último ya sea en parterres o en macetas y jardineras disponemos de gran variedad de flores perennes: peonias, lobelias, geranios, crisantemos, claveles, gervera, o de temporada como la petunia o las dalias, bulbos como los gladiolos y los tulipanes, ciclamen para invierno, así como cactus de floración roja.
Esperamos que con estas indicaciones os animéis a dar ese toque de color a vuestro jardín o terraza, aplicable también a otros colores chillones como el amarillo, fucsia o naranja, y como siempre, para asegurar el resultado, tu paisajista de confianza te puede ayudar.
Un pensamiento en “¡Atrévete con el rojo San Valentín también en tu terraza o jardín!”
Es muy raro ver tanto rojo en jardines y terrazas, pero bien combinado con otros materiales queda estupendo. Buen artículo. Saludos!